Durante los 3 primeros meses de la lactancia materna exclusiva (LME), se debe evitar por completo el consumo de lácteos para evitar cólicos en el lactante. La leche de los mamíferos presenta caseína en diferentes porcentajes, en las vacas, ovejas y cabras por encima del 80% y en los humanos un poco más de 40%, esta proteína es de difícil digestión y afecta el estómago inmaduro del bebé, causando los “retorcijones” o dolor de barriga durante los sus primeros meses de vida. Esto lo escuché cuando Lottie tenía 2 semanas.
Por lo tanto, relacioné el llanto esporádico con los cólicos, eliminé de mi dieta todos los lácteos, a los paquetes de comida les revisaba los ingredientes, estuve firme con no consumir absolutamente nada incluyendo el chocolate con leche, la pizza con mozzarella, etc. Después de varios días noté una diferencia con Lottie, lloraba menos. ¡Felicidad!
Una razón menos para llorar y una más para sonreír.
Un cafécito con leche de almendras o de coco y un pedacito de chocolate oscuro para celebrar mientras estoy tirada en el mueble y mi bebé duerme. ¡¡¡Yes, please!!!!!