Hola,
Hace par de semanas regresamos de vacaciones, estuvimos 12 días en Miami, Fl. (5 horas de diferencia con la hora local de Dublín). Una de las cosas que me preocupaba antes de salir de viaje era el tema de como entretener a Lottie en el avión durante 10 horas y la otra como haría para manejar el Jet-lag de ella cuando llegara a nuestro destino y cuando estemos de regreso en casa.
Si bien es cierto, el horario y las rutinas son esenciales para los bebés, niños y para nosotros los padres, de esta manera creamos hábitos para comer, dormir, jugar, bañar a los peques, etc. Por lo tanto el descontrol de uno de estos hábitos afecta a los otros. Cuando llegamos a nuestro destino ya pasada la hora regular de dormir empezó mi angustia (leve), ella estaba “despierta” y yo tratando de extender hasta que fuese la hora de dormir ajustándome al nuevo horario, es decir, normalmente la rutina de baño, pecho y dormir la manejamos entre 7:30 a 8:30 PM. Recordemos que nuestros hijos absorben nuestra energía, si tenemos estrés ellos lo sentirán y lo demostrarán, lo mismo con las rabietas, ansiedades, preocupaciones y más.
No obstante Lottie se despertó a las 3 AM hora local que sería las 8 AM hora Dublin, una hora saltando en la cama de un lado al otro y a dormir hasta las 8 AM local. De resto fue todo normal. El problema fue cuando regresamos a casa y donde pensé que menos tendría problemas con el sueñ0, las 3 primeras noches se quería dormir a las 12 AM y despertar a las 11 AM. Leí varios artículos y en varios decía que se debía respetar el sueño he ir cortando las horas poco a poco, mi energía no daba para 1 semana recortando hora por hora, porque a parte de mi cansancio, quehaceres, etc, las comidas de Lottie eran un desastre, tanto que hasta comía menos, rechazaba la silla, caos…
Finalmente el cuarto día puse el despertador a las 8:30 AM y con mucho amor la desperté, dejé que entrara luz al cuarto y nos fuimos a jugar al parque por 3 horas. He aquí la solución, desde ese día todo se hizo normal, bueno tuvimos un exceso de bostezos mientras jugamos en el parque pero nada que no tuviese solución, una buena siesta después de un rico almuerzo. Ese día corroboré con una super mamá amiga que estaba en lo cierto (mamá de @mirandaymanuela búsquenla en Instagram :D) ambas hicimos exactamente lo mismo y funcionó, el instinto de madre es el más sabio. Recuerden primero leer, llenarse de conocimientos e ideas para luego poner en práctica lo que ustedes consideren lo mejor para sus familias.
Un besito, me voy a dormir…
Rosa xx